Lovers in Madrid

En la siguiente entrada voy a hablar del contenido íntegro del concierto, por lo que si vas a ir a uno de los conciertos de la gira actual de Coldplay te aconsejo dejar de leer aquí. Puede que en algún momento el orden de las canciones fuera diferente, pero no puedo recordarlo mejor.


( La foto pertenece al concierto de Coldplay en Lyon el 4 de septiembre, y antes de que lo preguntéis, no, yo al que fui fue al de Madrid)

Las expectativas estaban muy altas. " Tienen un directo arrollador" decían algunos semanas antes del concierto, " Es un auténtico espectáculo", comentaban otros. Tras un corto pero interesante concierto de Albert Hammond Junior, guitarrista de The Strokes, que a mí me recordó muchísimo al grupo al que pertenece, un telón negro cubrió levemente el escenario. Las luces se apagan de nuevo y comienzan a escucharse los primeros acordes de Life in Technicolor. De fondo, presidiendo, La libertad guiando al pueblo de Delacroix, cuadro que ha marcado la campaña creativa de Viva la vida. El público se volvió loco cuando Chris y el resto de la banda aparecieron en escena saltando y agitando sus instrumentos en esta obra instrumental, que sirve de obertura para el resto del espectáculo. Sin dejar tiempo para presentaciones, fueron a lo seguro, empalmando los últimos acordes de la vida en technicolor con Violet Hill, que parece ya un clásico y la banda, y seguida por Clocks, una de las míticas de la banda. Tras estos primeros 10 minutos de auténtica locura, un pequeño descanso. Chris saluda al auditorio con un "Buena sera Madrid." que se le perdona, porque hablará en castellano durante el resto de concierto ( otra cosa es que nosotros entendiésemos su idioma). A Clocks le siguieron, In my place ( espeluznantemente emotivo), Speed of sound ( con la que bajaron unas bolas gigantes que se movían y daban luz, y que se llenaban de los colores característicos de X&Y) y un par de las nuevas. El concierto iba in crescendo durante todo el tiempo. Chris Martin lo vivía al límite, sudando fingía estar sufriendo un brote psicótico con la consecuente carcajada general o se tiraba por los suelos para cantar el final de alguna canción. A todo esto las espectaculares luces y pantallas que acompañaban al escenario. Una pequeña tele vieja en el centro del escenario emitía de vez en cuando imágenes ya sea del logo de VIVA que acompaña la web del grupo o un cuarteto de cuerda en canciones como Viva la Vida. Tras el apoteosis de la primera parte del concierto, Chris se sienta en el piano a un lateral del escenario y comienza a tocar una especie de acústico en la que mezclaba Talk con otras canciones de X&Y. Las luces se apagan y solo hay un foco encima del piano. Empieza a tocar diferentes arpegios y arreglos al piano que finalmente derivan en un The Hardest Part piano-voz que supuso para mí uno de los grandes momentos de la noche. Minutos antes de entrar al Palacio de Deportes le decía a mi amiga Cristina: " Me encantaría que tocasen The Hardest Part, pero sé que no va a ocurrir". Mi gozo no en un pozo, sino en una cima. Fue terminar el último acorde de The Hardest Part cuando todas las luces se encendieron, colores fucsias y violetas aparecían por todos lados... era Viva la Vida. La locura del público es inmesurable. Se escuchaban los "ooOooh" a kilómetros de Madrid. Tras tocar algunas canciones más de repente se despiden a una hora demasiado temprada. Evidentemente, hay truco. Lo que no sabíamos era que el truco estaba en que de repente iban a aparecer en uno de los palcos, entre el público para tocar The Scientist en versión acústica y otra canción cantada esta vez por el batería del grupo. Se vuelven a despedir, vuelve a haber truco. Y regresan con fuerza: Fix You. El público canta palabra a palabra la letra de esta preciosa canción que, como leí hace tiempo en un artículo, se ha convertido en un "himno generacional" para los seguidores del grupo. Siguió un estupendo y vibrante 42 y llegamos al que sin duda fue el cénit de la noche. Comienza a sonar Lovers in Japan, la enorme pantalla abandona el precioso cuadro que habíamos visto hasta entonces y comienzan a aparecer imágenes retro de elementos de la cultura japonesa. La canción es espectacular, pero más fue cuando de repente miles de mariposas de papel explotan encima de los espectadores y comienzan a caer. La sensación es indescriptible. Hay papeles de colores por todos lados que incluso brillan en la oscuridad. Un recurso tan efectista como efectivo, que encandiló a todo el personal. Siguen con Strawberry Swing y el fondo vuelve a cambiar, ya definitivamente en ya mencionado logo de VIVA que figura en la web de coldplay. Coldplay dice adiós y parece definitivo. La gente comienza a gritar el archiconocido "otra! otra!", mezclado con "ooOooh" y "yellow!yellow!". Vuelven. Las luces son de repente amarillas y suena la más famosa de entra las famosas canciones de Coldplay. Un broche final impecable para un concierto que cubrió más que de sobra las expectativas. Sólo pido que la próxima vez que vaya a verlos sean tan imagintaivos y vivan tanto la música como lo hicieron el pasado 7 de septiembre en Madrid.

Amazing New York

Mi querida y mejorcísima amiga Clara creó este blog con la intención de que subieramos videos de viajes. Aunque ella lo ha abandonado y básicamente lo mantenemos havie y una servidora a flote, voy a animarme y a colgar el primer video de un viaje. Aviso que la calidad no es muy buena puesto que no era yo la que realizaba el video (y mi pobre chico tiene sus limitaciones) pero se aprecia medio bien casi todo. Como ustedes ya sabrán estuve la semana pasada en Nueva York y aquí van mis recomendaciones y advertencias.

1. Recomendaciones:

- Times Square es sin duda el lugar que más me impresiono de esta ciudad.
- El Puente de Brooklyn, crucenlo andando, no sean vagos. Y ya que van, al otro lado del puente, ya en Brooklyn, al lado del puerto donde todos nos hacemos la típica foto con Manhattan al fondo hay una pizzería que se llama Grimaldi's. Las pizzas son enormes y deliciosas, tienen el premio a las mejores pizzas de EEUU de varios años y es donde iba Sinatra. Es barata y aviso que hay cola. Mi referencia una pizza large (18 pulgadas) con cuatro ingredientes y dos bebidas 24 $.
-El MOMA. Los viernes por la tarde es gratis y aunque algunas plantas pueden parecer una tomadura de pelo, es divertido y tiene algunas cosas espectaculares ("Las Señoritas de Avignon" de Picasso, por ejemplo). Y si además, como yo, tienes suerte y pillas una exposición de Salvador Dalí ya es la pera.
-Visiten la tienda de Abercrombie & Fitch de la 5ª Avenida porque es una experiencia única.
-Suban al Empire State aunque haya muchísima cola, merece la pena y a poder ser al atardecer porque podréis contemplar la espectacular vista tanto de día como de noche. Eso sí, no paguen los 15$ que cuesta subir al piso 102 porque es lo mismo y encima hay un cristal que te impide hacer fotos del paisaje.
-Compras en las tiendas del Soho y Tribeca.
-Paseo por Greenwich Village, sobre todo, para amantes de Woody Allen.
-Central Park, no se lo pierdan. La zona del Lago de Jaquie Onasis es espectacular.
-Aunque yo no he tenido la oportunidad. Vayan a un musical de Broadway. Eso sí saquen las entradas en su país porque si no les pasara como a mí y se encontraran todo vendido.
-Los restaurantes en los que elaboras tu propia ensalada para llevar.

2. Advertencias:

-Ir a la Estatua de la Libertad es una tontería. Es caro y se pierde toda la mañana. Es mejor coger el ferry gratuito a Staten Island que va y viene y pasa por al lado de la estatua o si no pueden contemplarla desde el Puente de Brooklyn.
- Cuidado con el Museo en honor a las víctimas del 11-S. Es horrible y una llorera espantosa. Está bien verlo pero aviso de que se pasa un mal rato y el museo está lleno de kleenex.
- En verano hace calor y la humedad es muy molesta por lo que hay que beber agua toooodo el tiempo.
- Aunque la diferencia con el dólar es sustancial, Nueva York es caro.
-La comida basura hace mucha ilusión los primeros días pero llega un momento en que el no poder comer bien es agobiante. No tienen aceite de oliva no de ningún tipo!
- Huele mal.



Precio del viaje:
- billete KLM con escala en Amsterdam =700€ (es lo que tiene el verano y que el dólar este bajo y que todos los españoles queramos ir al mismo sitio. Se puede encontrar muuuucho más barato).
- Hotel Dylan 7 noches (4 estrellas situado en Grand Central Station) = 900€
- Bote para comidas, visitas, transportes, etc... = 300$

Total= 1800€



*Los administradores del blog no me dejan colgarlo no se por qué así que en cuanto tenga el enlace a Youtube, lo subo.

Nueva York, ¡qué hermosa eres!

Podéis llamarme infantil o lo que queráis, pero Nueva York tiene cosas maravillosas. Ese es el caso de la foto, "The M&M's World". Los que me conocen sabran que me vuelven loca los M&M's asi que podéis imaginar mi felicidad cuando entro en una tienda de tres pisos en la que las paredes son como las que aparecen en la imagen, M&M's de todos los colores y sabores (menta con chocolate, café, chocolate negro, chocolate blanco, de cacahuete, de almendra...).
Pasados este punto, voy a resumir mis dos primeros días en la capital:

-Día 1: Largo, larguísimo paseo desde Grand Central Station hasta Little Italy y China Town. Todo paseando por la 5ª Avenida.

Recomiendo: Grand Central Station, Empire State Building, Chrysler Building y Flatiron Building. En dirección "Down" es mucho más interesante Broadway St. que Fith Av. ya que tiene tiendas de ropa super chulas. También merecen la pena Washington Park (donde está situada la universidad de Nueva York y puedes contemplar las clases desde fuera) y, por supuesto dar un paseo por las calles de Greenwich Village y el Soho (sobre todo para aquellos amantes del cine de Woody Allen se sentirán como en una de sus célebres películas).

Advertencia: aunque los edificios se vean claramente y parece que están muy cerca, no lo están. Es mejor tener claro el lugar al que vas y coger el metro.

-Día 2: Paseo a Central Park por la 5ª Avenida. Esta parte de la calle es la que alberga todas las tiendas conocidas y merece la pena visitarla, aunque advierto de que en Abercrombie & Fitch hay cola en la puerta para entrar (pero no os arrepentiréis de hacerla porque el interior es divertidísimo, como una discoteca y todos los dependientes son guapísimos. Nada más entrar te recibe un tío estupendo si camiseta, ¿qué más se puede pedir?). También pasareis un buen rato en la tienda de la NBA en la que te puedes hacer fotos al lado de los jugadores y ver tu diferencia de altura con respecto a ellos.
Central Park es alucinante, pero hasta el momento solo he visto el monumento a John Lennon en Strawberry Fields (es bonito y emotivo) y el zoo (en el que nos hemos colado por accidente) asi que no puedo contar más.

Recomiendo: Además de lo comentado anteriormente, este paseo está lleno de lugares emblemáticos (Apple Megastore, Manolo Blahnik, Trumph Tower, Tiffanys & co, etc...) pero entre tanto rascacielos tiene una construcción que llama la atención por donde está colocada. The St. Patrick's Cathedral es preciosa, sin duda una parada a tener en cuenta ya que puedes visitarla en 5 minutos y la entrada es gratuita.

Advertencia: Por muy cansados que esteis, pensaroslo dos veces antes de coger el típico carro bicicleta de los turistas porque cuesta 25$ el traslado a cualquier parte del parque.


*Como nuestro hotel está al lado de Times Square no lo he puesto en los apartados anteriores, pero hasta el momento es lo que más nos ha impresionado. Enormes edificios forrados de pantallas de televisión gigantes que parece que se te van a caer encima. Con todas las tiendas y los teatros de Broadway. Hay que dedicar un gran tiempo a Virgin Store porque su extensión es indescriptible.


Eso es todo hasta el momento!!

Proximamente...

Entre los días 21 y 29 intentaré ir detallando mi viaje, todo depende de lo cansada que esté por las noches cuando llegue a la habitación del hotel. El día 30 ofreceré un amplio resumen con lo mejor y lo peor del viaje.

Nueva York.

¿Qué pasa después de los 40? Nada.

Como mis queridos compañeros se niegan a hablar de viajes y a formar nuestro atlas particular de la Tierra, que era la idea, me han convencido para que haga una pequeña crítica sobre el largometraje de la exitosa serie "Sexo en Nueva York". Y es que hoy va de cine la cosa.
Por donde empezar...Bien, llevaba una semana deseando ir a ver esta película: ¡un capítulo de Sexo en Nueva York que dura dos horas y cuarto! ¡No puedo perdermelo! Sin embargo, ese es uno de los mayores errores que le encuentro a la película, estaban mejor los pequeños episodios de 22 minutos. No diré que me defraudó porque no lo hizo, era lo que esperaba. El excesivo glamour y el escaparate de firmas de alta costura que inundó la serie a partir de la cuarta temporada sobre todo, sigue presente y elevado a la enésima potencia. Resulta irreal y hasta un poco cansino que en los momentos más tensos, la protagonista Carrie Bradshaw sólo muestre preocupación por su ropa y por su armario. Aún así diré en su defensa que la gabardina que lleva puesta la chica con la que se inicia la película, es de Zara y que el bañador rosa de Charlotte se puede adquirir a un precio bastante asequible en el Corte Inglés.

Dichas todas estas cosas que ya están requetecomentas por muchos, algunas personas dicen que estas chicas han madurado con la edad. Desde mi punto de vista, más bien todo lo contrario. No se que mujeres de cuarenta años pueden permitirse ese ritmo de vida, pero desde luego no muchas. Unas mujeres entradas en la cuarentena que se comportan igual (o peor) que las chicas de veinte.

Yo personalmente me quedo con el escaparate de vestidos de novia, de vestidos de calle, de zapatos y de Manolos porque el argumento que han intentado darle a la película no tiene mucho sentido. Para todos aquellos a los que les guste al moda vayan a verla porque disfrutarán mucho (lo mejor de la película junto con algunos puntos de Samantha y Charlotte). Los que no vayan con esa idea mejor que se gasten el dinero de la entrada en otra cosa, que el cine está muy caro.


En la foto: Carrie así como de andar por casa, estoy deprimida me voy a verte en pijama...pero ¡en qué pijama!

Los cronocrímenes, a las 7 y 35

De sobra es conocida ya la Odisea que ha vivido el director Nacho Vigalondo para ver estrenada su ópera prima ( ópera prima en cuanto a largometrajes, claro). A pesar de haber ganado premios en festivales tan importantes como el de Sundance o el de Austin, Los Cronocrímenes tenían distribución en los países de habla inglesa y no en España, donde fue producida la película. Esta situación ligeramente surrealista no ha hecho más que rodear al film de un aura de "exclusividad", de la emoción del no saber si jamás llegaríamos a ver la primera película del que es sin duda uno de los mejores directores que tiene ahora mismo nuestro país.
Dejando a un lado los 2 intensos años que han pasado desde el fin de rodaje hasta la fecha de estreno ( que podéis leer de mano del propio director en http://blogs.elpais.com/nachovigalondo ), conviene ahora hablar de la película.

Los cortos de Nacho Vigalondo se caracterizan por tener un elemento "friki", de la más castiza cultura carnavalesca disfrazada de humor surrealista de un nivel de inteligencia severamente superior que la media de las comedias españolas. En Los Cronocrímenes, Vigalondo abandona el terreno del humor ( aunque tiene sus/bastantes momentos de comedia made in Vigalondo) y se pasa a la Ciencia Ficción pura y dura, con una historia de viajes en el tiempo y crímenes que no sabemos si son causa o consecuencia de dichos viajes en el tiempo. Es difícil explicar la grandeza de esta película sin contar ningún spoiler ( que sin duda se cargarían el sentido de la película). Técnicamente, se nota ( y mucho) que el director cántabro viene del mundo de los cortos. Está rodada con un gusto increíble. La historia se va construyendo en un guión cargado de referencias a otras escenas del género y de personajes contra-estereotipados ( el científico loco es aquí un cántabro que se queda el fin de semana trabajando). En una historia que llega a ser bastante complicada, la capacidad de Vigalondo de hilar todos los cabos que se van soltando a tavés de los viajes en el tiempo es increíble. En ningún momento sientes que te pierdes ( sólamente cuando la historia requiere que así lo pensemos).
Las actuaciones no son ni mucho menos notables, pero al menos son correctas. Lo mejor, sin duda, es el propio Vigalondo. La ridiculez que gira en torno a su personaje es encarnada con una comicidad que sólo Nacho sabe conseguir.
Si hay algo que deba reprochar a la película es, sin duda, la música. No es que sea mala, es que está insertada de manera totalmente artificial. En medio de una escena de tensión considerable una canción parece "acabar" ( pero en plan ATENUACIÓN del Windows Movie Maker) y tras un segundo de silencio comienza otro tema diferente. Sólo agradezco que Vigalondo nos haya incluido una canción de Blondie para hilar los saltos en el tiempo. También cabe destacar que en algunos momentos parece que a la historia le cuesta arrancar, pero es sólo en un par de ocasiones que no empañan el brillante resultado.



En definitiva, no sé si es por el amor ( ya repetidamente confesado) que siento por este director, o porque la película comienza con un plano del parking un centro comercial archiconocido en Cantabria y en el que he visto la gran mayoría de películas de mi infancia, pero me ha parecido un comienzo increíble praa una carrera que esperamos tenga el apoyo de la industria. Ahora sólo espero que el remake americano de la película no incluya explosiones ni efectos especiales de última generación ( sé que es mucho pedir) y que el próximo proyecto de Vigalondo siga siendo tan románticamente bizarro como es este asombroso viaje en el tiempo.


La mejor escena:
En el primer accidente, con las vendas, la sangre y el extraño líquido blanco.

La peor escena:

Cada vez que aparece la momia rosa no puedo evitar sentir una leve vergüenza ajena, afortunadamente cuando vas introduciéndote en la historia, pasa de ser sonrrojante a simplemente desternillante.


pd- esto SÍ es Ciencia Ficción y no lo del señor Shyamalan

Comillas, el lugar de los pequeños grandes tesoros

Vistas las entradas que me preceden, parece que voy a ser yo la que rompa el hielo y se lance a relatar un viaje. Pese a tener un cántabro de pro entre los colaboradores del blog, me atreveré sin meter mucho la pata a narrar mi experiencia en este pueblecito que me conquistó en verano y que me llevó a repetir en Semana Santa.
No se si son las verdes praderas, las vacas felices, las montañas, el silencio, el sonido del mar, la humedad o todo ello junto pero Cantabria es un lugar diferente. Entre las montañas, unas más altas que otras, de la Cordillera Cantábrica y coronadas por los Picos de Europa se encuentra este pequeño pueblo de calles estrechas y empedradas. Llama la atención que un lugar que no tardas más de diez minutos en recorrerlo a pie albergue tantas obras de arte en tan poco espacio. Y no me refiero al Capricho de Gaudí, al Palacio de Sobrellano o a la magnífica Universidad Pontificia, sino que cada rincón alberga un pequeño tesoro. Por eso he puesto esta fotografía, una casa cualquiera que bien podría albergar una película de Tim Burton.

Recomiendo:
- La ruta del Capricho de Gaudí, seguida del Palacio de Sobrellano y bajar paseando por la arboleda que conduce a la parte inferior del pueblo desde la que se puede contemplar a un lado la Universidad y al otro el Capricho y el Palacio.
- La Universidad Pontificia de Comillas, aunque aviso que está en restauración y que hasta 2009 no podrá visitarse.
- El cementerio. Una obra de arte.
- Las casas del pueblo con sus jardineras llenas de flores (en verano).
- Comer sardinas y pasear por la playa (una buena opción para comer grandes raciones a buen precio el Bar Filipinas)
- Hotel Joseín. Uno de esos lugares que ya no existen en primerísima línea de playa, vamos que está en un acantilado. Todas las habitaciones dan al mar y cuando sube la marea te da la sensación de estar flotando en el agua.

Rutas fuera de Comillas:
- Obligada: Santillana del Mar. Creo que dedicaré otra entrada a hablar de este pueblo porque es imposible describirlo en una sola frase.
- Picos de Europa y el mirador de Fuente Dé. Aunque aviso que es muy probable que no veáis nada por la alta nubosidad, hay que enterarse del tiempo. Aún así toda la ruta en coche a los Picos de Europa es genial y alberga tesoros como la Iglesia de Santa María de Liébana.
-Playa de Oyambre, de camino a San Vicente de la Barquera.

Advertencias:

-La comida de Cantabria está muy rica pero hay que tener cuidado con los empachos, ojito a las Fabes con almejas y al cocido montañés que pueden jugarnos malas pasadas y cuidado también con los pimientos rojos.
-En verano hay demasiada gente que se aglomera en las calles y es un poco agobiante, es mejor visitarlo en cualquier otra época del año.



Alojamiento y desayuno en el Hotel Joseín (3 noches) = 225€
Bote para comidas y excursiones= 100€
Dos depósitos de gasolina = 80€

Total= 405€ (precios para dos personas)



*Iba a subir un vídeo de esos que le gustan a Clara, acorralados por los monos en el Parque Natural de Cabárceno pero por problemas con mi ordenador no lo puedo hacer así que cuando lo tenga lo añado.